Recrear trajes históricos es una tarea muy dura. Conllevan mucho
trabajo, lloramos, sangramos y por supuesto tu familia piensa que es una locura
hacer algo que solo se va a lucir en una o dos ocasiones. Sin embargo hay algo
que siempre buscamos y deseamos oír, esa frase que dice :" ¡¡Guau!!
¡Parece que acabas de salir de otra época!" Sin duda, música para nuestros
oídos.
Pero, ¿En qué fallamos cuando no conseguimos ese clamor y esas miradas?,
¿porqué unos recrecionistas hacen un traje perfecto mientras que el resto nos
preguntamos en qué nos hemos equivocado? , ¿cómo podemos hacer para que nuestro
armario parezca salido de la época que queremos recrear?
Hay que darse cuenta de algo: siempre vamos a fallar como
recreacionistas históricos porque, evidentemente no estábamos allí. Siempre vestiremos
y actuaremos diferente. Se puede decir principalmente que la diferencia más
grande es el patronaje ya que, en la época, todos los trajes estaban hechos a la medida de cada cual. Así, si vemos
fotografías de trajes podemos ver que no están muy bien elaborados. En realidad
están confeccionados muy pobremente.
Otro vacío muy importante que no tenemos en cuenta es que los trajes de época no los llevamos nosotros diariamente...
mientras que ellos sí que lo hacían. Aparte del hecho que siempre nos va a
quedar corto.
Pero, se varios consejos para recreadores del siglo XXI que podemos llevar a cabo
para conseguir ese "look perfecto":
1-SILUETA:
Hablamos de la silueta porque es donde todo comienza. Un vestido de 1880 no
tiene ningún parecido a uno de 1834 a causa de las líneas y formas. Además, un
vestido elaborado sobre las prendas correctas hace que este enmarcado en el
marco histórico deseado. Así que a la hora de construir la estructura del
vestido, hay que asegurarse de que todo es adecuado y correcto. Durante la
mayor parte del siglo XIX el vestuario diario femenino incluye la camisa, los pololos, el corsé, la bajo falda o
enagua de pudor (si se desea), el armazón y las enaguas. (Estas últimas,
¡¡¡¡usémoslas!!! ¡por favor!)
Un corsé y una enaguas nos acercaran más al ideal de lo que pensamos. Muchos
recreacionistas no les dan importancia, y son básicas para empezar con una
buena base.
2-COSTURAS:
Las costuras bien elaboradas pueden catapultar tu creatividad en un traje
histórico. ¿Cuál es el gran error?: No colocar las prendas en las líneas de
costura correctas. Por ejemplo, en la costura del hombro a lo largo de 1880 se
puede observar que, el ángulo del lado del cuello cae hacia la parte posterior
del brazo. Darse cuenta de estas cosas y probarlas es un signo de que estás investigando
bien dicha época. Además, cada persona tiene un cuerpo distinto y tiene la
cintura a una distancia diferente a la que podría tener otra persona, por lo
tanto a la hora de hacer patrones hay que estudiar muy bien tu anatomía, por lo
menos dos veces, para poder hacer unos patrones correctos.
3-MONTAJE:
Todos sabemos que un patrón que se ajuste a nuestra silueta es crucial para poder
conseguir un look perfecto aunque la palabra "perfecto" es muy
difícil de alcanzar porque en nuestra imaginación pensamos en las fotografías
en las que nos hemos inspirado, o trajes de museo donde siempre están
perfectos. Los vestidos no
tienen arrugas, les van perfectos, igual que en las imágenes de época (fashion
plates). Pero, creo que estamos intentando alcanzar una meta errónea.[…]
El gran error no es evitar un periodo de tiempo concreto, sino no tomar el
tiempo necesario para crear la silueta adecuada mediante la elección de
elementos de la época, correspondiente a nuestra figura personal, además de perfeccionar
el ajuste para coincidir con nuestras imágenes de inspiración. Las pruebas
requieren tiempo y si es preciso repetirlas varas veces. Distínguete del resto
por no cometer el error de precipitarte a la hora de elaborarlo.
4-TEJIDOS:
La elección de las telas es uno de los
grandes errores a la hora de elaborar un traje histórico. Desde un
principio, si un recreacionista selecciona tafetán de nylon o un tejido de
poliéster, o no se usan los
metros adecuados, incluso con el material adecuado, la prenda que recreemos no
obtendrá el aspecto que deseamos. Podremos ver, por tanto, que la elección de
un tejido no es una tarea sencilla. La mayoría de las veces acabamos con tejidos
demasiado gruesos y pesados porque hoy día no tenemos en los tejidos actuales un estampado o un
bordado como los originales. Queremos
tejidos de calidad. Comprar tejidos económicos o porque sean bonitos es un
error histórico y al final solo nos decepcionaremos. El proyecto se convierte
en algo horrible, que solo significa pérdida de tiempo, de dinero y un traje en
el armario pensando lo que pudo haber sido y no fue.
Si quieres parecer como parte de la historia, debes intensificar y estudiar los tejidos y estar dispuesto a
ahorrar para comprar sedas de calidad o algodones. Aunque en ocasiones podemos
hacer trampas, y elegir mezclas como lana/nylon.
5-ADORNOS:
No hay que dejar al azar la elección de dónde se colocan los adornos. A la hora de colocarlos
siempre hay algún significado, función o propósito como equilibrar el diseño
original o el estar conectado a otros elementos de nuestro traje. El corte
incorrecto o no poner los
adornos necesarios, ya sean plisados, galeones o cintas (que es otro de
nuestros grandes errores) hace que sea un traje
amateur. Hace que los demás
recreacionistas piensen que:
1- No has trabajado adecuadamente la fase documental
2- No lo has podido acabar a tiempo
3- O que no tengas el dinero suficiente para completar el look
Así como no poner los
suficientes paneles a la falda, escatimar un poco de dinero puede costarnos al
final un mal resultado.
6-PROPORCIONES:
La proporción es otro elemento del diseño que puede salir mal, pero por norma
general los recreacionistas lo
llevamos bien. Cuando hablamos de proporciones nos referimos al tamaño de las
estructuras (aros y polisones) adornos y collares en relación con tu figura. Se
trata de llevar al patrón del papel las formas de tu cuerpo. Por ejemplo, si se
hace hincapié en una cintura estrecha, podemos ensanchar los hombros y las caderas para
visualmente estrechar aún más la cintura. Un error muy grande es comprar un
patrón, cortarlo y marcarlo en el tejido sin antes comprobar que se tratan de
tus medidas. No todo el mundo tiene el mismo cuerpo, te puede quedar la cintura
muy arriba o terminar arrastrando el vestido por dónde no debe.
Pero no todo es el ajuste, debemos de tener siempre en nuestra mente que todas
las piezas de la prenda deben recibir la atención necesaria para reflejar el
periodo de tiempo deseado.
7- HABILIDADES DE COSTURA:
A pesar de que la mayoría de técnicas modernas puedan ayudar a recrear un traje
histórico, hay pequeños detalles tales como rematar los bordes con un
bies o coser los bajos con la máquina de coser o emballenar un cuerpo
que hace que nuestro diseño destaque más. El error aquí no está en nuestras
habilidades, sino en no utilizar una técnica adecuada.
No hay que hacer dobladillos a máquina o no emballenar un cuerpo porque vas a
llevar corsé. Esta es una idea totalmente errónea. La única manera de mejorar
en tus habilidades es deshacer y repetir varias veces las técnicas y métodos
adecuados hasta aprenderlos.
8-ACCESORIOS:
Ya podemos tener el traje más espectacular, mejor diseñado, con el tejido
adecuado…, que si limitamos nuestro peinado a una cinta en el pelo se verá mal.
¿Por qué siempre dejamos la búsqueda del peinado hasta el mismo día del evento?
Pero no solo es nuestro peinado: también es el sombrero, los guantes, los zapatos o los
pendientes. Aquellas personas que han invertido tiempo desde el principio de la
elaboración del traje, el mismo empeño en investigar los peinados y accesorios saben que una coleta está fuera del
marco histórico, así como usar pendientes al azar, poner en sus manos guantes
de puntilla en el marco erróneo, usar cuero moderno o sombrillas con puntillas
de cualquier color compradas en tiendas de boda.
Yo creo que en estos casos es mejor no tener complementos a tener los mencionados. Un grandísimo error
es no tener accesorios adecuados que puedan completar tu traje.
9-ACTITUD Y COMPORTAMIENTO:
El último error que los
recreacionistas cometen es usar la actitud que usamos hoy en día. Hay que saber
comportarse y meterse en el papel para dar a nuestros trajes la etiqueta de
recreación histórica.
Es un proceso y un cambio, dado que no vivimos en la
época que estamos recreando. Estos trajes no son los corrientes con los
que hacemos nuestra vida cotidiana o eventos especiales. Por ello nuestro
comportamiento debe de ser el del siglo XIX. Cuando recreamos hay que actuar,
debemos de crear un personaje con todas sus peculiaridades y llevarlas a cabo.
Conviértete en tu personaje.
Hay que prestar atención en nuestro comportamiento. Cuidar los modales. Ser fiel al periodo que
recreas. Así que incluso con los
materiales adecuados, con el diseño ideal, con la espalda recta, los accesorios adecuados, debemos
recordarnos constantemente que debemos movernos como en dicha época.
Un error muy grande es que los
recreacionistas se dan por vencidos cuando ven que la realidad no coincide con
lo que habían soñado.
Todos estamos luchando para que el look concuerde con dicha visión. Hay que
seguir mejorando. Todos estamos a la altura de conseguir un traje ideal. Hay
que seguir avanzando y nuestros errores
disminuirán.
Autora: Jennifer Rosbrugh (Historical Sewing)
Traductora: Miss Elizabeth
http://historicalsewing.com/the-biggest-mistake-costumers-make